lunes, 27 de diciembre de 2010

capitulO I: SentimientOs


Estoy en el antiguo cuarto de mi padre, en casa de los abuelos, Rosalie, Emmet, los abuelos y mis padres están de caza por lo tanto me encuentro a los cuidados de Alice y Jasper.
 Miro el pequeño reloj que esta en la mesa, son las  tres de la madrugada y no puedo conciliar el sueño, siento algo extraño que oprime mi pecho y no me deja respirar. Miro a mí alrededor y… ¿Estoy soñando que sueño?
— ¿Estas bien? — susurra mi tío Jasper
— Si
— ¿Puedo pasar? — abre la puerta de la habitación y entra mientras formula la pregunta.
— Creo que ya estas dentro
— Siento… un dolor extraño
— Lo siento Jasper
— ¿Qué ocurre?
—Yo… no lo se… es solo que — se sienta junto a mí en la cama y toma una de mis manos, le da un apretón, siento como la tranquilidad y confianza se apoderan de mí. — es un mal presentimiento.
— Tranquila — dice una voz que no pertenecía a la de mi tío, levanto la vista y Jasper ya no esta, pero es remplazado por un hombre al cual no puedo verle la cara, intento alejarme de él, pero su agarre se hace mas y mas fuerte. Quiero gritar, huir.
— No, no grites — susurra mientras coloca una de sus manos libres en mi boca.
— ¿Qué quieres? —hable a través de su mano
— A ti — responde mientras se acerca a mí y me estrecha entre sus pétreos brazos, siento sus labios fríos y duros contra los míos, forcejeo cuando su boca baja a mi cuello… siento un dolor, un dolor que quema y me destroza, me doy cuenta que son sus dientes, sus dientes están perforando mi cuello, quiero alejar su rostro de mi, pero no puedo, mis brazos ya no tienen fuerza…

— Pequeña, despierta es solo un sueño.
—NO, BASTA, YA BASTA, ALEJATE DE MI — grite con todas mis fuerzas mientras golpeaba a quien intentaba tranquilizarme.
— Nessie tranquilízate no es real, nada de lo que ves es real.
Poco a poco fui obligando a mi cuerpo a que me obedeciera, mis manos dejaron de manotear y mis piernas dejaron de patalear, respire profundamente y abrí mis ojos que a continuación fueron nublados por una espesa capa cristalina.
— ¿Alice? —pregunte entre sollozos.
— Aquí estoy, tranquila — dijo mientras me abraza. — solo fue un sueño.
— No, era…era tan real —dije casi gritando y con la respiración agitada.
— Lo se, pero no lo era. —dijo Jasper mientras tomaba una de mis manos.
Sentí como un remolino de tranquilidad y cansancio se apoderaba de mi cuerpo y mente, mi respiración se normalizo y mis parpados comenzaban a pesar.
— Gracias —medio susurre y caí en la inconsciencia.

La luz que entraba por la ventana me indico que ya era de día, no quería despertar así que gire un poco y me tape la cara con la sabana, pero un olor muy familiar me hizo sentarme en la cama, abrí los ojos y frente a mi estaba él.
— Hola dormilona
— Jacob — dije mientras me acurrucaba en su ardiente pecho.
— Creo que alguien no durmió bien —susurro en mi cabello
— No quiero hablar de eso ¿Podemos ir al bosque a…?
— Cazar. — concluyo.
— Si — respondí mientras me sonrojaba.
Era extraño que me sonrojara ante la idea de ir a cazar, es algo normal pero no es eso lo que me da escalofríos, sino lo que Jake pueda pensar.
— ¿No hay nadie en casa?
— Salieron hace como media hora —respondió mientras me alejaba de su cuerpo — dejare que te arregles.
— Gracias — murmure.
— Te espero abajo—dijo mientras salía de la habitación.
Suspire al no sentir su calor, me levante y me fui directo al baño, me di una ducha no tan larga pues lo que quería era estar con Jacob, salí del baño con mi ropa interior ya puesta y tome  lo primero que encontré, unos jeans entubados con mis converse  y una blusa blanca con manga de tres cuartos.
Baje las escaleras a velocidad poco humana y me dirigí al patio, no estaba pero percibía su olor, me quede de pie un minuto y comencé a caminar hacia el bosque; de pronto un gran lobo cobrizo apareció frente a mi, mostrando los dientes, no quería atacarme pero me estaba retando, conocía perfectamente a Jake.
— Si eso es lo que quieres — dije mientras corría a toda velocidad, Jake aulló y comenzó a correr detrás de mí, le llevaba ventaja pero aumente la velocidad.
En cuanto llegue al pequeño río que daba a la casa donde vivía con mis padres me detuve y gire para ver donde estaba, pero el hermoso lobo se lanzo contra mi tirándome al suelo.
— Jake — me queje, aulló y comenzó a lamer mi cara, me miro a los ojos y me sonroje, me ofreció una risa lobuna y se fue tras de un árbol, cuando salió yo estaba sentada a la orilla del rio.
— ¿Estas bien? — se sentó junto a mi mientras formulaba la pregunta.
— Si
— Te conozco mejor de lo que imaginas
— Entonces, sabes lo que me sucede —contraataque
— Me lo imagino — susurro con la mirada perdida
Estuvimos en silencio por un largo rato, solo escuchaba el sonido de su alocado corazón, me agradaba escucharlo, era un sonido tranquilizante, acogedor y musical.
— Jacob ¿la imprimación dura para siempre? —pregunte de golpe
— Bueno —trago audiblemente — depende de lo que la imprimación quiera.
— No… no entiendo nada
— Si tú quieres terminar con el lazo que nos une, lo puedes hacer… es tu elección, la respetare —Fruncí el ceño ante la idea —aunque claro yo… no podría vivir sin ti y….
— Yo tampoco viviría sin ti. —lo interrumpí
— Sonara egoísta pero —sonrió ampliamente —lo se, y me alegra
Alargo una de sus manos y la coloco en mi mejilla izquierda, deje caer el rostro contra su palma con un suspiro, cerré los ojos y sonreí ante la calidez de su mano, gire un poco el rostro y bese la palma de su mano… tal vez antes podría a ver considerado aquello como un acto intimo, porque lo consideraba como a un hermano pero no ocurrió eso sino todo lo contrario, un sentimiento nuevo se apodero de mi y  no podía seguir ocultándolo.
— Bésame —susurre
— Nessie —murmuro a unos cuantos centímetros de mi boca
Su aliento era delicioso, una mezcla de bosque, pino o caoba quizá. No pude contenerme mas y estampe mis labios con los suyos, a decir verdad no sabia que hacer, era la primera vez que besaba a alguien y me alegraba que ese alguien fuera Jake, creo que pudo escuchar lo que pensaba porque sonrió y sus labios se movieron tiernamente por mi boca… rozo un poco con la punta de su lengua mi labio inferior y tiro de el ligeramente.
— Te amo —dijo colocando su frente en la mía.
Me acerque de nuevo a sus labios, estaba hambrienta, quería probar mas de esos labios carnosos y suaves, lo bese suavemente y sin saber  en que momento, mi lengua ya estaba presionando ligeramente sus labios, abrió la boca en un suspiro y su aliento lleno por completo mi cuerpo, sentí su lengua rozar la mía y ahora fui yo quien suspiro, el beso estaba pasando de tierno a algo mas extraño, no sabia que era pero me hacia estremecer, nuestras respiraciones ahora eran jadeos y podía sentir sus manos apretadas en puños a los costados de mi cintura, su temperatura aumento y comenzaba a temblar. Delinee su labio inferior y lo mordí ligeramente, sentí sus dedos enterrarse en mi piel, y unas imágenes muy confusas comenzaron a aparecer rápidamente por mi mente, pero no podía saber de que se trataban, el dolor en mi cintura se hacia mas fuerte. Gemí a causa del dolor.
— Lo… siento — dijo separándose rápidamente de mi y con la voz agitada.
— No… estoy… estoy bien — respondí entre jadeos.
— Esto no lo tenia en mente — murmuro mas para si mismo que para mi.
— ¿Qué… cosa? —pregunte mientras lo tomaba de la mano, nuevamente las imágenes comenzaron a aparecer, éramos Jake y yo, ambos ahí en el bosque, recostados en el verde y húmedo pasto, nos estábamos besando… recordé como se le llamaba a ese sentimiento desenfrenado que una pareja siente…“pasión”… retiro su mano rápidamente, seguramente había recordado que yo podía saber lo que pensaba con solo tocarlo.
— ¿Te lastime? —pregunto
—No —entrecerró los ojos — enserio Jake.
—Déjame ver.
—No… tengo nada—susurre acercándome a sus labios.
—Nissie…no. —dijo alejándome de su cuerpo, fruncí el ceño y rápidamente beso esa pequeña línea que comenzaba a formarse. —te llevare a casa.
Creí que se transformaría pero no lo hizo, caminamos lento y en silencio, no podía dejar de pensar en su boca suave y tersa sobre la mía y su delicioso aroma a caoba, no  entendía en que momento comencé a desear a Jacob como lo hacia, pero de una cosa estaba completamente segura, lo amaría por el resto de mi vida. Sonreí.
— ¿De que te ríes? —se paro frente a mi mientras formulaba la pregunta.
—Es solo que… te amo —susurre la ultima palabra.
—No como yo a ti, por ti soy capaz de cualquier cosa. —tomo mi mano y entrelazo sus dedos con los míos, me dio un corto beso en los labios y continuamos caminando.
— ¿Estas segura de esto? —susurro.
— ¿De que?
—Estar conmigo no como un hermano, amigo o padre sino como…
— ¿Novio? —concluí.
—Si —susurro.
—Jacob, te amo no se como ocurrió solo se que… —me calle cerré los ojos y comencé a proyectarle imágenes comenzando desde que por primera vez lo vi, sus hermosos ojos negros, que después de mirarme con odio;  gruño ante aquel recuerdo pero no me detuve, primero tuve miedo pero después algo dentro de mi me dijo que él no me haría daño y me miro con ternura infinita, después con forme iba creciendo, lo veía como un hermano mayor el cual me protegía y quería, con el cual jugaba y me divertía, poco a poco se convirtió en un padre mas para mi, en cuanto entre a la escuela se convirtió en mi mejor amigo al que le contaba mis mas íntimos secretos, tristezas, alegrías, decepciones y triunfos.
Hasta el día de hoy y en ese preciso momento, el solo hecho de sentir su mano cálida en la mía, haber probado sus labios hacia que cada parte de mi cuerpo cobrara vida y que sentimientos que creí jamás sentir estuvieran saliendo a la luz por él, por el amor que le tengo y le tendré.
No se en que momento dejamos de caminar pero el me tenia entre sus cálidos brazos mientras suspiraba en mi cabello.
—Te amo —dijo y nos fundimos en un beso tierno y suave.

1 comentario:

  1. Hola!!!! descubri tu blog por accidente y me gusta mucho :D voi a seguir leyendo
    me encanta como escribes ;)

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